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UA LAMENTA LA FALTA DE SERVICIOS DEL ARAN EN RELACIÓN A OTRAS ZONAS

El secretario general de Unitat d´Aran (UA), Paco Boya, lamenta que el territorio se “está quedando por detrás de otras zonas de montaña en lo que se refiere a la prestación de servicios a la ciudadanía”. El líder de la oposición en el Conselh Generau lamentó esta situación a raíz de la denuncia de una familia de Bausen, en el Baish Aran, que tiene problemas para llevar a sus hijos al colegio de Les.

Boya aseguró no conocer este caso en concreto, con lo que afirmó que “no me refiero a la situación de Bausen, si no a que se debería mejorar tanto el transporte escolar como otros servicios en general que estan mucho mejor en zonas vecinas que en la nuestra”. El líder de UA puso como ejemplos el caso de la Ribagorza aragonesa con la contratación de personal para atender a personas dependientes o del Pallars con la existencia de un bus que ofrece el servicio de biblioteca a los pueblos más apartados.

Del mismo modo, el transporte de las personas mayores a los centros de día es otro de los servicios “en los que no nos podemos permitir el lujo de perder calidad”, aseguró. Boya añadió que “no todo se puede solucionar con subvenciones, como pasa con el transporte escolar o con la atención a personas dependientes, lo mejor es lo que pasa en la Ribagorza aragonesa, por ejemplo, donde la administración ha contratado a cien mujeres para prestar este servicio a las familias que lo requieran, sin que estas deban preocuparse de buscar personal”. En cuanto al bus de bibliotecas, Boya recordó que su formación ya ha trasladado esta petición al Conselh, que prometió estudiarla pero que todavía no se ha llevado a cabo.

Por otro lado, la familia de Bausen cuyos hijos no podrán ir al colegio a partir del día 15 por el transporte, ha anunciado que organizará una fiesta reivindicativa para recoger firmas. Acerca de este caso se ha apuntado la posibilidad de que un taxi haga el servicio, ya que en Bausen hay una licencia, aunque el precio asciende a 440 euros mensuales y la subvención es de 700 euros por curso, explicó el padre, Julio Vicente.